La red de atención a las drogodependencias -centros de tratamiento- proporciona una
atención biopsicosocial, es decir, una asistencia integral que atiende tanto
aspectos orgánicos como psicológicos y sociales. De la misma forma, promueve
acciones encaminadas a la reinserción sociolaboral de las personas.
Hay que aclarar que hay centros de drogodependencias tanto públicos como privados
o concertados. La diferencia más visible entre ambos es que en centros públicos
ofrecen un tratamiento gratuito ya que están financiados por organismos
públicos. Por otra parte en los centros privados o privados-concertados se
establecen unas tarifas para los distintos tratamientos o terapias. Pero hay
otros factores que las diferencian; uno de ellos son las listas de espera, hay
que tener en cuenta que los recursos públicos están saturados debido a la gran
demanda que deben satisfacer y la espera se puede prolongar hasta 6 meses (por
ejemplo en las comunidades terapéuticas).Del mismo modo, al abarcar un grupo
tan amplio de población el tiempo real de terapia y atención se puede ver
bastante reducido en comparación a los centros privados donde la atención y
terapias a los sujetos pueden ser más extensas. También, en la misma línea, el
seguimiento que se realiza de cada persona en un centro privado puede ser mucho
más continuado que en un centro público.
En cuanto a las terapias grupales hay que decir que en los
centros privados se les da mayor importancia ya que pueden llegar a realizarse
de 2 a 3 veces por semana cosa que es muy beneficiosa para los sujetos, en
cambio en los centros públicos, bien sea por falta de tiempo o de recursos, no
se les otorga toda la importancia que deben tener.
Todo esto se debe tener muy presente en el momento de la
elección del centro de tratamiento ya que, dependiendo de las características
de la persona, de la adicción y del entorno será más efectivo un tipo de centro
u otro. Por ejemplo, una persona que necesite de mucha constancia, seguimiento,
contención y apoyo tenderá más a un recurso privado donde esto se puede
proporcionar y no a un centro público donde por cuestiones logísticas esto es
bastante complicado.
Por otra parte, una característica muy importante que tienen
en común es la existencia de equipos multidisciplinares de tratamiento. Éstos
son necesarios ya que, como ya se sabe, la adicción es multifactorial, es
decir, causada y formada por muchos factores, tanto psicológicos, físicos como
sociales. Desde aquí se recomienda que en el caso que su elección sea un centro
privado se asegure que el centro disponga de profesionales cualificados, dado que
es necesario que dentro de un equipo haya profesionales de distintas ramas:
médicos, psiquiatras, enfermeras, psicólogos, educadores sociales, trabajadores
sociales, etc.
Por último, destacar que en la actualidad existen centros de drogodependencias online, con las características de un centro ambulatorio presencial, que puede ser de interés para personas que residan lejos del centro de tratamiento, que no puedan asistir por motivos de horarios, o incluso aquellas personas que vivan en el extranjero. Asimismo también pueden servir para motivar a las personas o familiares que no quieran iniciar tratamiento en un recurso presencial, digamos que son la puerta de entrada.
Por último, destacar que en la actualidad existen centros de drogodependencias online, con las características de un centro ambulatorio presencial, que puede ser de interés para personas que residan lejos del centro de tratamiento, que no puedan asistir por motivos de horarios, o incluso aquellas personas que vivan en el extranjero. Asimismo también pueden servir para motivar a las personas o familiares que no quieran iniciar tratamiento en un recurso presencial, digamos que son la puerta de entrada.
Dicho esto, se pasa a explicar los distintos recursos dentro
de esta red asistencial de drogodependencias que pueden ser privados o públicos
aunque se le dará un énfasis más de asistencia pública en este artículo. Como
se aprecia en el siguiente esquema, la red pública de asistencia es bastante
estructurada, tiene como centro principal, o de referencia para los
drogodependientes los CTA que son los Centros de Tratamiento Ambulatorio que
derivan a las personas a otros recursos si es necesario. Hay que decir que la
red privada no está tan estructurada pero en general primero se acude a un Centro
de Tratamiento Ambulatorio privado y éste es el que derivará a la persona a
otros recursos si los profesionales lo creen necesario.
Esquema de la red
pública asistencial.
En muchas ocasiones la persona se
dirige a su Centro de Atención Primaria (CAP) cuando detecta un problema con su
consumo o bien por alguna molestia o síntoma atribuible al consumo de
sustancias y allí el profesional sanitario puede recomendar y derivar a la
persona, si se detecta que ésta tiene problemas con las sustancias, a un Centro
de Tratamiento Ambulatorio (CTA) para que le orienten y asesoren. De la misma
forma, desde los Servicios Sociales (SS), si los profesionales detectan alguna
problemática con las sustancias o por petición de la propia persona también
hacen una derivación al CTA.
Centros de
Tratamiento Ambulatorio (CTA)
El CTA es el centro de referencia
para las personas drogodependientes ya que allí se pueden dirigir directamente
para pedir información, asesoramiento o tratamiento sin necesidad de ser
derivados por un profesional de la red asistencial, así pues, en este recurso
se realiza una asistencia ambulatoria de acceso directo. Las modalidades de
tratamiento en los CTA son múltiples en función de las necesidades y la demanda
de la persona. El equipo asistencial es multidisciplinar (médicos y/o
psiquiatras, psicólogos, trabajadores sociales, educadores sociales,
enfermeras, etc.); este equipo se encarga de programar, de forma conjunta, el proceso
terapéutico de cada persona, desde su llegada al centro hasta la reinserción
sociolaboral del sujeto, así como proponer las derivaciones a otros recursos
que se consideren necesarias, recomendables y adecuadas según la persona.
Los CTA según la zona geográfica donde estén situados
reciben distintos nombres, Unidades de Conductas Adictivas (UCA) en la
Comunidad Valenciana, Centro de Atención a las Drogodependencias (CAD) en la
Comunidad de Madrid o Centros de Atención y Seguimiento (CAS) en Catalunya.
Cabe mencionar que, para acceder a
un CTA la persona debe ser mayor de edad, o bien
que el centro disponga de un programa de tratamiento para adolescentes, de lo contrario se debe dirigir al Centro de Salud Mental
Infantil y Juvenil (CSMIJ) donde será asesorado y tratado por el
abuso/dependencia de sustancias.
En un CTA se puede realizar todo
un proceso terapéutico siempre que la persona reúna las condiciones para llevar
a cabo un tratamiento ambulatorio. Si eso no es posible, es cuando el CTA
propone las derivaciones a otros recursos.
Unidad de desintoxicación hospitalaria (UDH)
Son dispositivos de corta estancia
(entre 7 y 15 días, aproximadamente) en los que se atienden a personas con
dependencia de sustancias psicoactivas que requieren tratamiento en régimen
hospitalario ya que el tratamiento ambulatorio no parece viable bien sea por
circunstancias personales, sociales y/o familiares. Una vez realizada la
desintoxicación en la UDH, ésta vuelve a derivar al sujeto al CTA ya que es el
centro de referencia para la persona. Para acceder a estas unidades se debe
hacer un informe psiquiátrico desde el CTA, ya que se accede por derivación de
este recurso, donde se exprese la necesidad del ingreso.
Unidad de Crisis (UC)
Es un servicio de
ingreso urgente y de estancia corta para atender a personas adictas en
situación crítica y que no pueden ser atendidas en ningún otro centro. Es
decir, en ocasiones las personas con dependencia a sustancias pueden presentar
situaciones graves que no tienen ni una base exclusivamente médica ni
psicológica ni social con lo cual no pueden ser derivados ni a urgencias
sanitarias ni a servicios especializados de psiquiatría ni a servicios tales
como albergues, comedores, etc. Así pues, estas situaciones críticas son un conjunto
de diferentes factores que no permiten hacer una derivación a los servicios
especializados mencionados, pero hay una urgencia de ingreso en un centro para
poder hacer una contención temporal de dicha situación. Durante este tiempo, en
este tipo de unidad, se realiza de forma conjunta una contención de la
situación y un buen diagnostico médico y psicosocial que facilite el diseño de
un plan de atención para la resolución de la situación crítica y para atender
la drogodependencia y los problemas asociados a la misma. La duración en la UC
es limitada (en torno a los 7 días) ya que, como ya se ha comentado, los
objetivos son la contención y la definición de las actuaciones para tratar o
paliar los factores que han generado la situación de crisis y no el tratamiento
de la dependencia propiamente.
Unidad de Patología Dual (UPD)
Debido a la alta
prevalencia de patología mental grave simultánea en los trastornos de
abuso/dependencia de sustancias psicoactivas (a eso se le llama patología
dual), se ha visto la necesidad de crear estas unidades. Su objetivo principal
es ofrecer una atención especializada a las personas con un trastorno por
abuso/dependencia de sustancias y trastorno mental severo, con graves
alteraciones del comportamiento que requieren un abordaje específico. Es una
unidad de corta estancia, con funciones diagnósticas, terapéuticas y de
estabilización del sujeto, que atenderá a la persona hasta que su estado
clínico les permita continuar con el tratamiento en los servicios ambulatorios
o bien otros recursos residenciales. La derivación a este recurso se hace de
forma coordinada desde la red de salud mental y la de atención a las
drogodependencias mediante el CTA.
Centro de Día (CD)
Es un servicio de
acogida diurno en el que se realiza un tratamiento de deshabituación,
rehabilitación y reinserción. Se desarrollan programas ocupacionales, de
enseñanza prelaboral y laboral, y de adquisición de hábitos y
responsabilidades. También se realizan terapias psicológicas individuales y
grupales. La finalidad es la de posibilitar las condiciones personales y
sociales para la convivencia, participación e integración de las personas con
dependencia a sustancias. Para acceder al recurso es necesaria una
desintoxicación previa y se accede mediante el CTA u otros recursos, en la
mayoría de casos.
Comunidad Terapéutica (CT)
Es un recurso que
ofrece un tratamiento socioeducativo de larga estancia (de 6 a 9 meses
aproximadamente) en régimen residencial. Los objetivos, a gran escala, de este
recurso son la deshabituación, rehabilitación y reinserción de las personas
ingresadas. Está orientada a conseguir el control y la extinción de conductas
adictivas separando a la persona de su entorno habitual (relacionado y asociado
al consumo) y a facilitar la integración social en un nuevo entorno que no esté
relacionado con el de consumo. En este recurso, como en prácticamente todos los
de la red asistencial, el equipo de profesionales es multidisciplinar (médicos,
educadores sociales, psicólogos, etc.). Los motivos principales de ingreso en
una CT son el fracaso anterior en tratamiento ambulatorio, la presencia de una
desestructuración social elevada en su propio entorno y/o la falta de soporte y
contención familiar. Para el acceso a este recurso es necesaria una desintoxicación
previa y suele hacerse una derivación desde el CTA u otros recursos
especializados.
Piso residencial (PR)
Es un recurso
residencial donde se pretende un régimen de autogestión de la persona en su
proceso de deshabituación, rehabilitación y reinserción. Además se facilita la
integración social de la persona ya que son viviendas donde residen varias
personas con drogodependencias que disponen de atención profesional externa.
Está dirigido sobre todo a personas con necesidades residenciales y con falta
de soporte social y/o familiar. Las personas que residen en estos pisos
colaboran en las tareas de mantenimiento y limpieza del hogar. Los
profesionales que proporcionan dicha atención externa son, en general,
educadores sociales y/o psicólogos que pueden estar presentes en el piso a lo
largo del día. Para acceder a este recurso la persona tiene que estar
abstinente (hacer una desintoxicación previa) y suele derivarse desde el CTA u
otros recursos especializados.
Hasta ahora se
han descrito aquellos recursos para el tratamiento de las drogodependencias
pero también se debe dar importancia a aquellos recursos en que lo que se
intenta educar en salud a las personas que están en consumo activo, es decir,
aquellos recursos a los que se les denomina de Reducción de Daños.
Centros y Programas de Reducción de Daños
Son servicios
dirigidos a personas consumidoras de drogas, frecuentemente dependientes, que
por el motivo que sea no quieren o no se sienten aún en condiciones de entrar a
tratamiento. El objetivo de la Reducción de Daños, es reducir al máximo todos
aquellos problemas de salud física y psicosocial de estas personas. Desde estos
dispositivos, se educa en salud a estas personas, es decir, se les da consejos
sobre cómo consumir de forma higiénica y más segura y se les proporciona
material estéril para ello con el objetivo de prevenir contagios de cualquier
tipo de enfermedad. También se les da consejos y recomendaciones sobre su
dieta, hábitos, responsabilidades, etc. Dentro de la Reducción de Daños los programas
más conocidos son el Programa de Mantenimiento con Metadona (PMM) y el Programa
de Intercambio de Jeringas (PIJ).
Programa de
Mantenimiento con Metadona (PMM)
Este programa
está destinado a personas dependientes a opiáceos. La metadona es un agonista
(tiene la misma función) de los opiáceos pero es una sustancia mucho más segura
y que se puede modular para ir suprimiendo la dosis con menores complicaciones
en el síndrome de abstinencia. Este tratamiento debe ser prescrito por un
médico y controlado y pautado periódicamente por el mismo.
Programa de
Intercambio de Jeringas (PIJ)
Es un programa
que provee a los usuarios de drogas por vía parenteral (inyectada) de material
de inyección estéril y otro tipo de servicios a cambio de la entrega de sus jeringuillas
usadas. De esta forma se evitan los contagios que ya se han mencionado y se
realiza un consumo más higiénico y seguro.
Relacionado con
este programa se hace necesario mencionar las Salas de Venopunción o también
denominadas Narcosalas.
Salas de
Venopunción
Éstas permiten a
los consumidores de sustancias tomarla en un espacio cerrado, limpio y que está
supervisado por médicos, enfermeras y personal capacitado. En este recursos
también se les facilita el material esterilizado y se realiza una tarea
educativa para ayudar a estas personas y mejorar su calidad de vida.
Por último hay
que comentar que en muchas ocasiones, los programas y centros de Reducción de
Daños están dentro de los mismos CTA y, en caso contrario, se puede dirigir al
CTA para que sea orientado sobre estos programas y servicios.
Es gratis?
ResponderEliminar