jueves, 25 de octubre de 2012

Conceptos generales

Definición de los conceptos generales en drogodependencias: intoxicacióntolerancia, síndrome de abstinencia, abuso, uso y dependencia y diferentes sustancias.

La intoxicación es el estado que sigue al consumo de una sustancia psicoactiva que produce perturbaciones en la percepción, la cognición, el comportamiento, el juicio y/o de otras funciones y respuestas psicofisiológicas. Este cuadro es altamente dependiente al tipo y cantidad de la droga consumida y está influido por el nivel de tolerancia individual, las expectativas personales respecto a los efectos de la sustancia, etc.

La tolerancia es la capacidad del cuerpo para asimilar la sustancia sin producir trastornos en el mismo. La persona tiene un nivel inicial de tolerancia según sus características personales y étnicas que aumentará con el consumo continuado de una sustancia, de modo que necesitará mayor cantidad de dicha sustancia para lograr los mismos efectos y que disminuirá gradualmente cuando se mantiene un periodo de abstinencia. Hay que tener muy en cuenta esto último ya que, en diversas ocasiones, las sobredosis se producen después de un periodo de privación de la sustancia en la que la persona toma la dosis que habitualmente tomaba, la cual puede ser letal por la bajada del nivel de tolerancia durante ese periodo.

Según el DSM-IV, existen dos tipos de trastornos por consumo de sustancias, el abuso y la dependencia.

El abuso de una sustancia es el camino para llegar a una dependencia de la misma; el abuso se podría definir como un uso nocivo o dañino o, dicho de otra forma, existe abuso de una droga cuando sus efectos negativos son superiores a los positivos.

Según el DSM-IV, hay dos criterios para diagnosticar el abuso; en primer lugar, los síntomas no han cumplido nunca los criterios para el diagnóstico de la dependencia de la sustancia y en segundo, hay un patrón desadaptativo de consumo de sustancias que conlleva un deterioro o malestar clínicamente significativos, expresado por un consumo recurrente de dicha sustancia que conlleva el incumplimiento de las obligaciones cotidianas o bien, tener problemas legales repetidos relacionados con la sustancia (p. ej.: conducir ebrio) o, consumir recurrentemente en situaciones en las que hacerlo es físicamente peligroso (p. ej.: la conducción de un vehículo) o bien, consumir de forma continuada a pesar de tener problemas sociales o interpersonales continuos causados o exacerbados por los efectos de la droga. Pueden darse todas las situaciones pero sólo es necesario que se produzca una de ellas durante un periodo de doce meses para el diagnóstico.

En la dependencia se precisa un patrón desadaptativo de consumo de la sustancia que conlleva un deterioro o malestar clínicamente significativos, expresado por tres o más de los ítems siguientes en algún momento de un periodo continuado de doce meses:
  1. Tolerancia: La necesidad de cantidades crecientes de la sustancia para conseguir el mismo efecto.
  2. Abstinencia: Presentar el síndrome de abstinencia o retirada con la interrupción del consumo. Dicho síndrome es un conjunto de síntomas y signos opuestos a los que se presentan en la intoxicación aguda. Este síndrome está determinado, además de por el nivel de adaptación entre el organismo y la droga, por el aprendizaje previo y las expectativas existentes.
  3. Hay una pérdida del control: La sustancia se toma en cantidades, frecuencia o periodos más largos de lo previsto o pretendido.
  4. Hay un deseo persistente y/o esfuerzos ineficaces de controlar o interrumpir el consumo.
  5. Se emplea mucho tiempo en la obtención, consumo y recuperación de los efectos de la sustancia.
  6. Hay una reducción importante de las actividades sociales y laborales debido al consumo.
  7. Se continúa el consumo a pesar de tener conciencia de problemas psicológicos y/o físicos persistentes que parecen causados o exacerbados por el consumo de la sustancia.

Hay que tener muy presente que una persona, tras unos meses abstinente, en un contexto de estímulos muy particular, asociado al consumo debido al aprendizaje previo, puede experimentar un deseo de consumir y también determinados síntomas de abstinencia similares, aunque con menor intensidad, a los síntomas del síndrome de retirada correspondientes a la sustancia de consumo.

Definición del concepto droga

Son varias las definiciones que se pueden encontrar sobre lo que es una droga debido a que el campo de las drogodependencias es multidisciplinar, es decir, debido a que el consumo de sustancias es un fenómeno complejo y heterogéneo, es necesario la implicación de profesionales de distintas ramas como la medicina, la biología, la psicología, la educación social, etc.. De este modo, cada rama profesional trata de destacar uno u otro aspecto sobre las drogas.

Desde aquí, la que consideramos más completa y a su vez una de las más extendidas es la que sostiene la Organización Mundial de la Salud (OMS):

Es toda sustancia que introducida en un organismo vivo por cualquier vía (inhalación, ingestión, intramuscular, endovenosa), es capaz de actuar sobre el sistema nervioso central, provocando una alteración física y/o psicológica, la experimentación de nuevas sensaciones o la modificación de un estado psíquico, es decir, capaz de cambiar el comportamiento de la persona, y que posee la capacidad de generar dependencia y tolerancia en sus consumidores.

Por lo tanto no solo la marihuana, cocaína, pasta base, éxtasis, o heroína son drogas sino también lo son el alcohol, el tabaco, la cafeína, y algunos fármacos. El concepto de droga entonces se refiere a que la modificación puede ser perjudicial o beneficiosa para el ser vivo, y que depende del tiempo de administración y de la dosis, y de las características del propio ser. 

Para que una droga sea considerada como tal ha de cumplir las siguientes condiciones: 
  • Ser sustancias que introducidas en un organismo vivo son capaces de alterar o modificar una o varias funciones psíquicas de éste (carácter psicótropo o psicoactivo).
  • Inducen a las personas que las toman a repetir su autoadministración por el placer que generan.
  • El cese en su consumo puede dar lugar a un gran malestar somático o psíquico (dependencia física o psicológica). 
  • No tienen ninguna aplicación médica y si la tienen, pueden utilizarse con fines no terapéuticos.


Depresoras  
Opio y derivados
Hipnóticos, sedantes y tranquilizantes
Alcohol 
Estimulantes
Coca / Cocaína
Cafeína / Teína
Anfetaminas y derivados
Tabaco
Psicodélicas
LSD
Peyote / Mescalina
Hongos alucinógenos
Compuestos sintéticos alucinógenos
Cáñamo y sus derivados

Información sobre los efectos y consecuencias para la salud que ocasiona el consumo de: heroína, benzodiacepinas, alcohol, cocaína, anfetaminas, MDMA, ketamina, GHB, tabaco y cannabis.


¿Qué es?: Es un derivado sintético del opio. Es una droga depresora del sistema nervioso central, produce una sensación de analgesia y sedación. Se presenta generalmente en forma de polvo blanco o marrón. Puede consumirse inyectada, esnifada o inhalando los vapores después de calentarla.

Efectos de su consumo: Éstos son casi inmediatos; los efectos psicológicos son descritos como una sensación de euforia, placer y bienestar general. Los primeros consumos suelen generar náuseas y vómitos con inhibición del apetito y cierta necesidad de ingerir alimentos dulces. También produce, debido a su analgesia, una cierta insensibilidad a los procesos dolorosos.

Riesgos para la salud: La inhibición del apetito produce adelgazamiento que puede cursar con anemia. Además produce estreñimiento, caries, insomnio, inhibición del deseo sexual, pérdida de la menstruación, infecciones diversas asociadas al lugar de consumo y/o al estilo de vida del consumidor. El riesgo de desarrollar dependencia es muy alto y la interrupción del consumo genera la aparición del síndrome de abstinencia con síntomas como lagrimeo, sudoración, ansiedad, dolores musculares, fiebre, etc., además de mucha ansiedad. En consumidores habituales aparecen trastornos de personalidad con ansiedad y depresión, alteraciones de las funciones cognitivas (problemas de memoria) e intelectuales.

Si consumes ten en cuenta que:
El consumo con jeringuillas compartidas aumenta el riesgo de contraer enfermedades infectocontagiosas como la hepatitis y el VIH.
En el caso de su consumo esnifado, el “rulo” no debe compartirse, debido también a la transmisión de enfermedades.
Las relaciones sexuales que se realicen con o entre consumidores de heroína, deben ser realizadas con preservativo.
La adulteración que la sustancia recibe en el mercado negro es un factor de riesgo especialmente importante.
Tras un periodo sin consumir se debe tener en cuenta que la tolerancia a la sustancia disminuye, por tanto disminuye tu dosis, si tomas la misma cantidad podría producirse una sobredosis.




¿Qué es?: Son depresoras del sistema nervioso central, se usan para reducir la ansiedad (ansiolíticos) o bien para inducir el sueño (hipnóticos). Algunas benzodiacepinas también son usadas para la epilepsia o las contracturas musculares.

Efectos de su consumo: Sus efectos dependen del fármaco y la dosis pero en general producen somnolencia, alterando las fases del sueño, relajación muscular y/o disminución de la ansiedad.

Riesgos para la salud: Sus efectos adversos son debilidad, cansancio, vértigo y mareos, dificultad en la concentración, amnesia anterógrada (incapacidad de consolidar los nuevos recuerdos), falta de coordinación motriz (p. ej.: ataxia), pesadillas, inquietud, irritabilidad, estados confusionales, visión borrosa, etc. También puede cursar con cuadros de hipomanía, desinhibición y descontrol. En dosis muy elevadas o en combinación con otras sustancias depresoras (p. ej.: alcohol) puede producirse una reducción del ritmo respiratorio que puede inducir un estado de coma e incluso la muerte.

Si consumes ten en cuenta que:
Se deben consumir siempre bajo control y prescripción médica.
No mezclar con otras sustancias depresoras del sistema nervioso como el alcohol.
Para el cese del consumo se debe hacer una pauta de retirada por parte de un profesional ya que dejarlo de golpe puede producir el efecto rebote (aparición de los síntomas por los que se prescribió dicho medicamento pero con mayor intensidad).




¿Qué es?: Es una droga depresora del sistema nervioso central. El alcohol se divide en bebidas fermentadas que son aquellas producto de la fermentación de los azucares como la cerveza, la sidra y el vino y que tienen una graduación de entre 4 y 15º y las destiladas que son una depuración de las fermentadas y tienen una graduación de hasta 50º.

Efectos de su consumo: Los efectos del alcohol dependerán de varios factores: edad, peso, sexo, cantidad y rapidez de la ingesta, ingestión simultánea de comida y combinación con bebidas carbónicas. A dosis bajas, el alcohol es estimulante, produce cierta euforia, desinhibición conductual y emocional e inhibición de los centros cerebrales responsables del autocontrol. Aunque en un principio tenga estos efectos, ya se ha dicho que es una sustancia depresora y después de esta primera etapa produce somnolencia y relajación, dificultad para hablar y asociar ideas, y descoordinación motora (ataxia). A nivel más físico los efectos que produce son la destrucción de células hepáticas, trastornos digestivos, disminución del ritmo cardiorrespiratorio y pérdida de la masa neuronal.
Unos de los factores de los que depende el alcohol es la cantidad presente en la sangre (tasa de alcoholemia) que se mide en gramos por litro de sangre:
0.5 g/l: Euforia y disminución de reflejos.
1 g/l: Desinhibición y dificultades para hablar y coordinar movimientos.
1.5 g/l: Embriaguez con pérdida de control de las facultades superiores.
2 g/l: Descoordinación del habla, de la marcha y visión doble.
3 g/l: Estado de apatía y somnolencia.
4 g/l: Coma.
5 g/l: Muerte por parálisis de los centros respiratorios y vasomotor.

Riesgos para la salud: Así pues, el consumo continuado puede provocar trastornos digestivos como gastritis, úlcera gastroduodenal y cirrosis hepática. Del mismo modo también puede producir cardiopatías, impotencia y trastornos neurológicos. A nivel psicológico produce cambios de humor, insomnio, suspicacia, irritabilidad, paranoia, celotipia (celos compulsivos e injustificados) y psicosis alcohólicas. Además el alcohol favorece la deshidratación ya que aumenta la producción de orina.

Si consumes ten en cuenta que:
Comer suficiente para evitar los efectos tóxicos sobre el estómago vacío.
No conducir. 
No mezclarlo con otras drogas.
Tomarlo poco a poco ya que reduce el daño. Es decir, suelta el vaso entre trago y trago. 
Si vas a tener relaciones sexuales, tómalo lo menos posible, ya que el alcohol reduce la excitación. 
Intercala bebidas que no tengan alcohol (refrescos, agua…) para una correcta hidratación.
Si vas a salir, ponte un tope para beber y no lo tomes con alimentos salados, ya que beberás más.


¿Qué es?: Es un principio activo que se obtiene a partir de las hojas de coca, una planta originaria de algunas regiones de América del Sur. Es una sustancia estimulante del sistema nervioso central. Según el proceso de elaboración, hay dos formas de presentación: la primera es un polvo blanco y cristalino conocido como cocaína. Contiene clorhidrato de cocaína y se consume principalmente esnifada. La segunda forma de presentación es la base libre o también conocida como crack, se suele consumir fumada y los efectos son más rápidos e intensos debido a que pasa más rápido al cerebro a través de los pulmones.

Efectos de su consumo: Como sustancia estimulante, provoca inicialmente euforia y bienestar, hiperactividad, aumento de la seguridad en sí mismo, disminución de la fatiga y del hambre e insomnio. También aumenta la presión arterial y la frecuencia cardíaca, se dilatan las pupilas y aumenta la temperatura corporal.

Riesgos para la salud: El consumo continuado produce trastornos cardiovasculares (p. ej.: infarto de miocardio o hemorragias cerebrales), dolor abdominal, nauseas, pérdida del apetito, insomnio, patologías respiratorias como irritación de la mucosa nasal o sinusitis, perforación del tabique nasal, etc. El consumo crónico de esta sustancia puede provocar trastornos psíquicos como ideas paranoides, alucinaciones, agresividad, ansiedad o depresión.

Si consumes ten en cuenta que:
Si se fuma o inyecta la adicción es mayor.
Los efectos aumentan cuando la tomas en situaciones de estrés como durante viajes, aglomeraciones, y trabajando.
No mezclarla con alcohol y otras drogas, pues sus efectos pueden potenciarse o mantener tolerancia cruzada.
No compartir el “rulo”, ya que se pueden transmitir enfermedades infectocontagiosas (hepatitis…).
No conducir.
Y… si se padece alguna enfermedad cardíaca, psicológica o estás embarazada… ni la pruebes.



¿Qué es?: Son sustancias sintéticas de efecto estimulante. Se introdujeron como medicamentos para tratar distintas enfermedades pero, debido a su alta capacidad de generar dependencia y de sus efectos secundarios actualmente únicamente se usan para el tratamiento de la narcolepsia y el trastorno por déficit de atención y, obviamente bajo prescripción y control médico. En contextos de ocio se conoce como speed y se consume mayoritariamente por vía nasal.

Efectos de su consumo: Produce, inicialmente estados de euforia y excitación, incremento de la energía y disminución del hambre y la fatiga. El consumo también provoca un aumento del ritmo cardiaco y la presión arterial, dilatación de las pupilas, sequedad de boca, diarrea y fiebre. Cuando estos primeros efectos pasan se experimenta una sensación de bajada con fatiga, depresión, insomnio o somnolencia y ansiedad entre otros efectos.

Riesgos para la salud: El consumo prolongado de esta sustancia puede causar una fuerte adicción y originar trastornos físicos como complicaciones de corazón y circulación de la sangre, problemas en el hígado, subidas repentinas de la temperatura corporal, etc. De la misma forma, produce efectos psicológicos tales como cambios de humor, paranoia, alucinaciones, ansiedad, etc.

Si consumes ten en cuenta que:
Conviene beber bastante cantidad de líquido, especialmente agua o zumos, y cuando su consumo se realice bailando, hay que entremezclar períodos de descanso.
No es adecuado mezclarlas con el consumo de alcohol o con bebidas que tengan alguna graduación alcohólica ni con otras drogas.
Si se padece de: corazón, riñón, hígado o problemas psicológicos, no es recomendable, bajo ningún concepto, su consumo.
Si se trabaja al día siguiente, es mejor pasar de ellas.



¿Qué es?: Pertenece a la familia de las fenitelaminas. El MDMA, también llamado éxtasis, frecuentemente se puede adquirir en forma de comprimido o de cristal, aunque también se puede encontrar en forma de polvo o dentro de cápsulas.

Efectos de su consumo: Los efectos aparecen entre los 30 y 60 minutos. En general produce sensación de fuerza, facilita la comunicación, aumento de la sociabilidad, empatía, euforia, sensación de autoestima aumentada, deseo sexual aumentado, desinhibición, locuacidad, inquietud, intensificación de las sensaciones emocionales, confusión y agobio. A nivel físico produce taquicardia, arritmia, hipertensión, sequedad de boca, sudoración, contracción de la mandíbula, temblores, deshidratación e hipertermia (aumento de la temperatura corporal o más conocido como golpe de calor).

Riesgos para la salud: Uno de los grandes riesgos de esta sustancia es el aumento de temperatura corporal, el golpe de calor. Además produce arritmia, convulsiones, insuficiencia renal, rabdomiólisis (necrosis muscular), coagulopatía, hemorragias cerebrales, trombosis e infartos cerebrales, insuficiencia hepática. La tolerancia se desarrolla rápidamente así que se tiende a tomar dosis mayores pero éstas conllevan mayores efectos secundarios: tensión mandibular, resacas, etc. A nivel psicológico produce crisis de ansiedad, trastornos depresivos y alteraciones psicóticas.

Si consumes ten en cuenta que:
Conviene beber bastante cantidad de líquido, especialmente agua o zumos, y cuando su consumo se realice bailando, hay que entremezclar períodos de descanso.
No es adecuado mezclarlas con el consumo de alcohol o con bebidas que tengan alguna graduación alcohólica ni con otras drogas.
Si se padece de: corazón, riñón, hígado o problemas psicológicos o si estás pasando una mala racha, no es recomendable, bajo ningún concepto, su consumo.
Si se trabaja al día siguiente, es mejor pasar de ellas.
Si se puede, realiza un análisis de la sustancia para reducir los riesgos asociados con las adulteraciones y la variabilidad en las dosis de las pastillas.
Ten en cuenta que los riesgos disminuyen y los efectos deseados aumentan con el consumo espaciado, cada 4-6 semanas.



¿Qué es?: Es un anestésico disociativo que actualmente se usa en veterinaria y en el ámbito hospitalario (sobre todo en países del tercer mundo). Se comercializa principalmente en forma de líquido inyectable, en el mercado ilegal se puede encontrar también forma de polvo o de comprimidos.

Efectos de su consumo: Los efectos de esta sustancia aparecen a los diez o veinte minutos del consumo y duran unas dos horas. En dosis bajas esta sustancia alucinógena provoca falta de coordinación, visión borrosa y dificultad para concentrase. En dosis elevadas puede provocar estados disociativos, es decir, sentirse como fuera del propio cuerpo, como si se flotase; también produce alteraciones de la memoria y la percepción, delirios, alucinaciones, desorientación, dificultad para moverse, depresión respiratoria y una parada cardíaca. Los efectos aumentan si va acompañada de consumo de alcohol o cannabis.

Riesgos para la salud: Básicamente las complicaciones debidas al consumo son de tipo psicológico, afectando a la salud mental de la persona, se puede producir ansiedad, depresión, paranoia, trastornos de memoria y concentración. El consumo continuado puede producir graves problemas de visión y lesiones cerebrales.

Si consumes ten en cuenta que:
Conviene beber bastante cantidad de líquido, especialmente agua o zumos, y cuando su consumo se realice bailando, hay que entremezclar períodos de descanso.
No es adecuado mezclarlas con el consumo de alcohol o con bebidas que tengan alguna graduación alcohólica ni con otras drogas.
Si se padece de: corazón, riñón, hígado o problemas psicológicos, no es recomendable, bajo ningún concepto, su consumo.
Si se trabaja al día siguiente, es mejor pasar de ellas.




¿Qué es?: Es un anestésico depresor del sistema nervioso central que se presenta como un líquido incoloro, en ocasiones teñido, sin color y más bien salado. El GHB es un polvo blanco pero habitualmente se presenta disuelto en agua.

Efectos de su consumo: Los efectos aparecen a los diez o veinte minutos y duran aproximadamente unas dos horas, con postefectos más suaves que pueden prolongarse dos horas más. En pequeñas dosis produce una relajación acompañada de un descenso de la ansiedad y una moderada desinhibición. En dosis más elevadas produce una relajación intensa o profunda con somnolencia, pérdida de la coordinación y dificultades en el habla. Puede pasar que la persona se quede dormida durante unas 2 a 4 horas, aún así hay quienes experimentan euforia y desinhibición. En cantidades muy elevadas (superiores a los 4 gramos) suelen producir sueño profundo, de forma que resultará prácticamente imposible despertar a la persona durante 3 o 4 horas.

Riesgos para la salud: Pueden darse mareos, náuseas, vómitos, visión borrosa o doble, descoordinación y somnolencia. En ocasiones también pueden producirse dolores de cabeza, contracturas musculares y más raramente, diarrea, amnesias y convulsiones. Al día siguiente se puede sufrir un leve aturdimiento, mareos y dolores de cabeza. La intoxicación por GHB produce una pérdida de conciencia y ralentización de la respiración que puede derivar en una depresión respiratoria. Generalmente la persona se recupera espontáneamente al cabo de 2 a 4 horas pero, la situación puede agravarse por mezclar el consumo de otras sustancias, sobre todo las depresoras. En ocasiones la sobredosificación produce vómitos, cosa peligrosísima en alguien que ha perdido el conocimiento ya que existe un alto riesgo de ahogamiento.

Si consumes ten en cuenta que:
Conviene beber bastante cantidad de líquido, especialmente agua o zumos, y cuando su consumo se realice bailando, hay que entremezclar períodos de descanso.
No es adecuado mezclarlas con el consumo de alcohol o con bebidas que tengan alguna graduación alcohólica ni con otras drogas.
Si se padece de: corazón, riñón, hígado o problemas psicológicos, no es recomendable, bajo ningún concepto, su consumo.
Si se trabaja al día siguiente, es mejor pasar de ellas.
Hay que ser muy cuidadoso con la dosis que se consume ya que hay un margen muy estrecho entre la desinhibición y la sedación.
En los primeros consumos es recomendable hacerlo en un entorno controlado y empezando con dosis bajas.
Es muy recomendable tomarlo en compañía habiendo informado a la otra persona previamente para facilitar una respuesta adecuada ante una reacción adversa como puede ser un desmayo, pérdida de conciencia o vómitos.


¿Qué es?: Junto con el alcohol es la sustancia adictiva que más se consume y que más problemas sanitarios genera. En el humo del tabaco se han identificado un gran número de sustancias muy toxicas como la nicotina, el monóxido de carbono y alquitranes. Es una droga estimulante y no depresora como algunos mitos afirman. Se asocia a una sustancia depresora debido al relajamiento que produce en el adicto fumarse un cigarrillo, no obstante este supuesto relax es simplemente el alivio de la ansiedad producida por el “mono”.

Efectos de su consumo: Produce una disminución de la capacidad pulmonar, fatiga prematura, merma de los sentidos del gusto y el olfato, envejecimiento prematuro de la piel de la cara, mal aliento, color amarillento de los dedos y dientes, tos y expectoraciones (especialmente matutinas). Psicológicamente los efectos buscados son la relajación y la sensación de mayor concentración.

Riesgos para la salud: A largo plazo el tabaco produce faringitis y laringitis, dificultades respiratorias, tos y expectoraciones, úlcera gástrica, bronquitis y enfisema pulmonar, cardiopatías (infarto de miocardio) y diversos cánceres: de pulmón, boca, laringe, esófago, riñón y vejiga. A nivel psicológico genera una gran dependencia y produce ansiedad y depresión derivadas de la dificultad para dejar el consumo.

Si consumes ten en cuenta que:
Si hay personas a tu alrededor… pregunta antes de fumar, pues puedes molestar tanto a los que nunca han fumado como a los posibles exfumadores que haya, o los que se encuentren en proceso de deshabituación. Respeta a aquellas personas que no quieran fumar ni ser fumadoras pasivas.
Deja la última parte del cigarrillo en el cenicero, es la que tiene mayor concentración de tóxicos.
Si padeces de pulmón, corazón, circulación, estómago o estás embarazada… no lo pruebes.
No fumes conduciendo, en la cama, en ambientes cerrados, con polvo o materias en suspensión, o en presencia de niños o enfermos, aumentan exponencialmente los riesgos de otro tipo y los propios de la adicción tabáquica.
Apagar bien el cigarrillo previene incendios.



¿Qué es?: Es una sustancia activa que se obtiene de la planta cannabis sativa. Las presentaciones más consumidas de esta droga depresora del sistema nervioso central son la marihuana (hojas y tallo secadas y trituradas) i el hachís (resina prensada).

Efectos de su consumo: La relajación, alteraciones en la percepción y memoria, somnolencia, sensación de lentitud, y descoordinación de movimientos son los efectos principales de esta sustancia. Dificulta el ejercicio de funciones complejas como expresarse con claridad, dificultad para concentrarse, procesos de aprendizaje y la memoria inmediata. El consumo de dicha sustancia provoca también risa fácil, intensifica las sensaciones y estimula la creatividad. Algunos tipos de cannabis pueden tener efectos alucinógenos. A nivel físico disminuye la presión arterial, provoca taquicardia, sequedad de boca, sudores y enrojecimiento y brillantez de los ojos, también aumenta el apetito.

Riesgos para la salud: El consumo de cannabis puede incrementar el riesgo de padecer problemas respiratorios y cardiovasculares y diversas formas de cáncer. Como afecta a la atención y la coordinación, hace que aumenten las posibilidades de padecer un accidente laboral o de tráfico. También afecta negativamente en la memoria y la capacidad de aprendizaje. En algunas personas puede provocar crisis de ansiedad y, en caso de tener antecedentes familiares o una predisposición individual puede desencadenar trastornos depresivos, de ansiedad o psicóticos. En consumidores de dosis elevadas, afecta al aparato respiratorio con tos crónica y bronquitis, empeora los síntomas en personas con problemas de hipertensión o insuficiencia cardíaca, altera las hormonas responsables del sistema reproductor y de la maduración sexual y reduce la efectividad del sistema inmunitario.

Si consumes ten en cuenta que:
No mezclar con alcohol y otras drogas, los efectos pueden cruzarse y crear sensaciones y/o situaciones indeseables.
Si estás estudiando o trabajando, o lo vas a hacer, no lo consumas. 
Si piensas que te ayuda a la concentración, es justo lo contrario, enlentece los procesos.
Si padeces o has padecido enfermedades cardíacas, respiratorias, hormonales o psicológicas… no lo consumas.
Si tienes menos de 18 años, los efectos son más graves. 
Su tenencia o consumo en lugares públicos es ilegal y puede ser multado. 
Cuando lo mezcles con tabaco, recuerda que también estás consumiendo nicotina, por lo tanto, evita apurar el “porro” hasta el filtro, sus residuos como con el tabaco, se concentran en el humo principal y en la colilla. 
Si has fumado “porros”, no conduzcas. No aceptes subir a un vehículo si el conductor lo ha fumado. 
Recuerda que el consumo de cannabis no te quita los malos rollos que tengas.

2 comentarios:

  1. Hola Zaida i Cia.
    Excelente blog!
    Soy adicto a los Opiaceos desde hace mas de 20 años...Ahora estoy con medicación de mantenimiento" y no consumo.
    -Hay dias en los que pienso que mi vida no tiene sentido
    -Hay veces que pienso que la solución seria un consumo puntual para aliviar el extres.
    -Aunque estoy todo el dia ocupado y con personas que no consumen...no encuentro motivación.
    -Mi vida se ha vuelto una rutina, monotonia,etc...
    Donde yo vivo (CP:32350) no hay centro para hacer dinamicas de grupo,etc...
    Cosas que creo que son fundamentales.
    -He estado en varios tratamientos, centros y veo que esto es una enfermedad cronica
    sin cura .Solo se puede estar abstinente pero la Adicción esta dentro de un@.
    Que me aconsejais?
    Gracias por vuestra ayuda e Información.
    Un Saludo.

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